martes, 23 de marzo de 2010

El infierno se hizo espera













Había una cierta pesadez en el ambiente,
una mezcla de invierno sofocado y primavera;
una confusión de luces que convertía las aceras
en asideros azules, las señales de tráfico en basura,
y la bocina de los coches con el canto de los pájaros.

Todo se volvía gris en el huido trasiego de la calle.

Ninguna llamada, ninguna señal
que apuntalara los quicios del día.
Y el infierno se hizo espera,
el derecho revés y el viaje a Ítaca
un nudo de inocentes encuentros
hacinados en el semáforo de la avenida.

7 comentarios:

Bletisa dijo...

Pues muy bien Tino, sí señor.
Un poema estupendo en el que me despista el título porque yo saco la conclusión de que la espera es el infierno y no al contrario pero bueno, son cosas mías.
Un beso.

faustino lobato dijo...

Pues no mi querida amiga. El título es perfecto para decir que el infierno, del que parto como un hecho, es decir de la dura realidad, se amortigua con la espera o lo que es lo mismo con el permanente deseo. La metáfora para el infierno es la espera.Me alegra que te guste...cosas del capitán Nemo. Gracias. Un abrazo.

Carlos Rivero. dijo...

Tino.Hacía tiempo que pasaba,y ahora me leído de una tacada estas últimas entradas.Sobre todo ésta,tiene un no se qué..sensaciones descritas con rigor fotográfico de mundos transcendentes que están en la realidad de cada día..¡ me encanta!.
Un abrazo

Carlos Rivero. dijo...

Fe de erratas de mi comentario anterior:
Dode dice ."Hacía tiempo que pasaba",debe decir:"Hacía tiempo que NO pasaba"...
Perdón,jajaj..no soy pasota en este sentido.

faustino lobato dijo...

Gracias Carlos por tu paso y tu comentario.Me alegra que te guste. Si leyeras el poemario: Quiebros del laberinto, que describe sobre todo el casco antiguo, te darías cuenta de esas emociones fotográficas que a veces llevo a los poemas...Bueno...espero que un día charlemos de estas cosas comunes que nos gustan tomando un café o una cerveza...Un abrazote. Tino

Suso dijo...

Realmente excelente, me ha gustado mucho.
Supongo que yo voy a interpretarlo de una manera muy diferente a tu idea pero te cuento lo que me inspiró al leerlo... yo veo uno de esos días oxidados, donde esperas un claro entre las nubes que no termina de llegar, y uno se siente solo entre tanta gente que espera un semaforo, el tráfico veloz, el asfalto, y sigues esperando algo que no tienes, quizás un chispazo de alegría o de esperanza que cambie el rumbo de estos días...

Un abrazo

faustino lobato dijo...

Más o menos Suso...por ahí va el asunto se trata de dejarte sorprender en medio de tanto hastío...No vas desencaminado amigo. Gracias por pasar y comentar. Un abrazo. Tino

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