Tal vez la noche complicó el aire
de los rostros, manteniendo las palabras
con ese tono de humedad apunto
de perderse en la memoria. Tal vez
habrá que esperar uno, dos días
a que el aire se vuelva brisa
y no dañe los ojos; y el agua brote
tal vez, de los labios de un libro.
4 comentarios:
Me encanta el final: los labios de un libro. Es cierto que muchas veces, es mejor dejar que las palabras se asienten en la boca y en el corazón antes de dejarlas salir.
Besos.
Ana Mª Castillo
Me encanta el final: los labios de un libro. Es cierto que muchas veces, es mejor dejar que las palabras se asienten en la boca y en el corazón antes de dejarlas salir.
Besos.
Ana Mª Castillo
Gracias Ana por tu comentario, gracias por dejar tu huella en este habitáculo. Un abrazote.
Como a Ana Mª me ha sorprendido el final...
Como siempre es muy grato pasarse por aquí y leerte.
un abrazo
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