A los que saben vivir a solas.
A solas te recuerdo, con esa soledad
que tiene rostro
de espera y nombre de miradas. Y
en este sentirte
sin verte, te imagino carne de
mis palabras con sabor
a horizonte y a nublado. Luego te
escapas, solo,
bajo esta corriente de plata que inunda
la memoria,
con el impetuoso rumor del agua, buscando
otro paisaje
ajeno a esta sinfonía de piedra y
nubes. Siempre, a solas.
Foto de Carlos Rivero
4 comentarios:
Tu palabra fluye y fuye recreándose en permanente corriente....
Un abrazo.
...y en este sentirte sin verte...te imagino...
No sé que decirte a estas alturas...me gusta leerte.
un abrazo
Gracias por el comentario. Un abrazote
Publicar un comentario